“Domingo… ese día en el que quedarse en casa por la mañana mientras los niños juegan parece la mejor opción… ¡Pues no! Es mucho mejor salir en familia y quedar con los amigos para tomar unas cervezas, mientras los pequeños lo pasan genial viendo un concierto pensado para ellos con canciones pensadas para ti: Madonna, Ramones, Alan Parsons, The Smashing Pumpkins, La Casa Azul… Al menos es lo que intentamos en Noesruido”. Así convocan David Bueno y Fede Trillo, el dúo que integra el grupo castellonense Noesruido, al público en las redes sociales para el concierto que ofrecerán el próximo domingo 2 de febrero a las 12:00 en la sala Magic Box del Auditori de Castellón. Las entradas cuestan 5 € y se pueden adquirir en Discos Medicinales, Discos Ritmo, El Señor Miyagi y el propio Auditori; los niños y las niñas menores de 3 años entran gratis.
Si estuviste en su último concierto en el Teatre Municipal de Benicàssim con motivo de la fiesta navideña del festival Formigues o en su estreno en Las Matinales del Four Seasons, sabes de lo que hablamos. Noesruido se convirtieron en 2013 en uno de los fenómenos que más están animando la programación infantil en Castellón y su éxito ha alcanzado hasta La Rambleta de Valencia, donde ya han ofrecido dos actuaciones con una gran afluencia de público. Y si todavía no los has disfrutado con tus hijos, ya tardas.
Se trata de un dúo de experimentados músicos castellonenses, habituales en la escena rock underground, con discos publicados en bandas como Los Brujos, Santi Campos y Los Pequeños Incendios, Telepath Boys, deBigote… que ahora han decidido apostar por un espectáculo familiar muy divertido, en el que conjugan iconos de la música pop de las últimas décadas con la proyección de dibujos animados perfectamente reconocibles para los más pequeños, además de contar con la constante participación del público, que juega e interactúa con la música y las imágenes de distintas maneras. Como puedes comprobar en la foto de arriba, sus conciertos suelen terminar en una celebración colectiva con los asistentes cantando y bailando encima del escenario. ¿Un buen plan para el domingo por la mañana, no?